VACA

Ayer, mientras cenaba confit de pato en un sitio llamado ·El huerto· pensé en la carne. Pensé en los animales y en las vacas.

A veces pienso que me encantaría poder ser vegetariano, me encantaría no comer animalitos (Ya lo dice Belén: No es lo mismo comerte un ciervecito que comerte un iceberg...un iceberg no tiene vida. El mar tiene peces, me entiendes? Yo no como peces, porque tienen vida...

Pero es que claro mi cuerpo está tan acostumbrado a comer, que me pide sangre, me pide carne, me pide trozacos de algo poco hecho...AAAHHH! Soy como Hanníbal, pero en bonico, claro!

( y menos refinado)

También pensaba que los extremistas ecologistas en un futuro no muy lejano harán campañas, seguro, para que prohiban comer carne animal y si han prohibido el tabaco, ¿por qué no prohibirán el solomillo? Dime tú!Te imaginas:

-Psst..Psst...eh, ven a mi callejon, allí tengo unos gramicos de chopped de buenisima calidad, 100% cerdo...lo vas a flipar...

Y es que hace poco escuché, bueno tal vez alguien me contó que alguien le había contado algo que alguien había leido y era algo así como que alguien había abierto un restaurante donde se cocinaba carne humana. No recuerdo si era cierto ( o si lo he soñado, o si me metí esos 100% gramos de chopped clandestino), pero el restaurante funcionaba, porque la gente antes de espicharla donaba su cuerpo vía certificada, para que lo cocinaran...

Lo comenté en la cena y ya estuvimos especulando sobre posibles platos:

-De primero un caldo de la abuela (con la abuela incluida, claro...imaginate su cabeza y su pelo blanco flotando...Oiga, hay una mosca en mi caldo de la abuela!)

-Luego podemos tomar unas orejitas caramelizadas con salsa de retina y salteado de uñas marinadas.

-Unos pezoncillos salteados con verduras y acompañado de deliciosos y crujientes dientes de leche.

-Unas nucas de niños chinos (eso si te va lo picante claro)

-Y de postre la especialidad de la casa: Rabos de negro...que seguro son afrodisíacos...

P.D: Llegará un día en el que todos seremos felices comiendo verde y respirando aire puro, mientras algunos comen embutido y panceta en callejones oscuros y en afters de mala muerte.

2.P.D: ley de vida, ley de vida...el hombre evolucina (la mujer también, claro). Y hay muchas leyes de vida que se van quedando por el camino.

¿A qué no vivimos en cuevas?¿ A qué no dejamos que el sarro se apodere de nuestra boca llenadola de tonos verdes, marrones y grisaceos? Pues...comemos carne, si señor...Y me encanta, viva el entrecot, viva el cordero y sí, viva el cochinillo con la espalda partida por un plato...ais...